No debe ser tan fácil como parece, sobre todo en una sociedad
como la nuestra, donde tienen que trabajar fuera y en casa, o sea dos trabajos.
Al ser más débil (físicamente, por lo general), son
maltratadas por nosotros los hombres. Tienen como defensa el teléfono 016, que
las asiste 24 horas al día.
En los trabajos son recriminadas, cobran menos que los
hombres, en el mismo puesto de responsabilidad. Son acosadas por los hombres
sexualmente.
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Menos mal que tienen el sexto sentido, que las defiende de
cualquier acoso. Se dice que querer retener a una mujer enfadada, es como
querer retener un puñado de aceite apretando el puño.
Son más sensibles que los hombres y sufren en un mundo que es
malo para todos, pero sobre todo para las féminas, que se sienten indefensas.
Hay muchos hombres que las defienden. Uno de ellos soy yo y
escribo este artículo, para que se sientan un poco mejor y sepan que también
hay hombres buenos.
Mujer, lucha por tus derechos, no te dejes avasallar.
Trabaja, pero segura. Exige tu sueldo y en casa hay que repartirse las tareas
entre todos.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.
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