lunes, 30 de septiembre de 2019

BRUJ@S


Una pareja se conocen, se gustan, se casan, tienen hijos, los crían y son felices en su ambiente familiar. Todo va de perlas, todo es bonito, todos se quieren mutuamente.
Pero, muchas veces, con el cansancio vienen las infidelidades en la pareja. Con solo mirar un hombre, con deseo carnal, o su mujer dejarse mirar por los hombres, provocándoles, ya se están siendo infieles el uno a la otra y esta al uno.
No ocurre siempre, pero ese deseo va con nosotr@s y aquí es donde viene el amor brujo, que no es otra cosa que la infidelidad. Muchas veces, por los hijos sobre todo, la pareja se soportan.
Otras veces discuten fuertemente y se separan. Aquí son los hijos los que llevan las de perder. Digo los hijos y también el esposo, porque en la mayoría de los casos, es el marido el que tiene que irse de casa.
Abandonar lo que juntos han construido, se queda en la calle, casi sin dinero, porque la bruja se queda con casi todo (porque se lo permite la Ley Española). Se queda con los hijos, la mayor parte del dinero, con la casa y con todo lo que pueda.
Ese amor que fue tan bonito, roto por los intereses económicos y de poder. Desgraciadamente, hoy día está a la palestra.
Mientras lleguen a un acuerdo económico, de la casa y sobre todo de visitas a los niños y la tan tarareada custodia compartida, hay un entendimiento en la pareja. Pero es muy triste que se tengan que separar después de tantos dulces besos.
Mientras no se llegue a la violencia de género, generalmente por parte del marido, la cosa va medio bien.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

sábado, 28 de septiembre de 2019

LA VIDA ES UNA RUEDA


Gira y gira sin parar, sin detenerse. Cuando lo pasamos bien gira más rápido, cuando lo pasamos mal, más lenta y esta rueda es ni nada más, ni nada menos que el reloj.
Queremos que vaya deprisa cuando estamos trabajando, queremos que llegue la hora de nuestro descanso. Queremos que vaya despacio cuando lo pasamos bien. En una fiesta, por ejemplo.
Nunca debemos tener prisa, porque el tiempo pasa y debemos disfrutar de las cosas buenas de nuestro trabajo y de los momentos difíciles, para eso debemos estar siempre serenos.
Con la cabeza fría y el corazón caliente, resolveremos esos pequeños altercados, que nos sobrevienen cada día. Tendremos una respuesta, sin enfadarnos, para cada problema.
En el trabajo es más difícil, porque hay que cumplir las normas, pero si no nos alteramos, todo se resolverá con una sonrisa en los labios, si bien, a veces, hay que enseñar los dientes.
Si uno se siente satisfecho consigo mismo, lo estará también con los demás. Si por el contrario, está mosqueado, no puede responder con verdad y corrección a los problemas.
La rueda sigue girando, ya estemos contentos o enfadados. El reloj no para y ¿Qué prisa tienes tú de que pase el día? Si después vendrá otro y otro.
Así se pasa la vida y cuando queremos acordar, somos unos viejos que para “nada” sirven y el reloj sigue corriendo, no se para porque tú te lo estés pasando bien.
Disfruta de la vida, que son esos ratitos mágicos.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

viernes, 27 de septiembre de 2019

LOS SERENOS


No me vengo a referir  a los antiguos serenos, que de noche cuidaban nuestros coches, los aparcaban, nos decían donde estaba el nuestro y nosotros les dábamos una propina.
Me refiero a los no bebedores, serenos, que no prueban el alcohol, ni bebidas o sustancias estupefacientes. La verdad es que ya quedan pocos y están muy contados.
No digo yo, en una ocasión (fiesta, comunión, boda, bautizo o cuando se te apetece tomes una copa o una cerveza, no te la bebas si  tienes que conducir un vehículo).
A la hora de tomar una decisión de calado, si se está sereno, esta se toma con más celeridad, verdad, claridad, conciencia y muchos adjetivos que se le podían añadir.
Las comidas copiosas son como una droga para el cerebro, haciendo que tampoco podamos decidir, con verdad ante un problema que nos pueda surgir. Además son indigestas y te hacen engordar y no sentirte bien, como podías estarlo.
Pero lo nuestro son los no bebedores de alcohol y no consumidores de productos estupefacientes. Estas son personas hechas y derechas, que dirigen, sin saberlo, al mundo.
El que menos te lo piensas puede ser un personaje, en silencio, sin que nadie lo sepa (siquiera él). Puede ser un hombre o una mujer, que para eso somos similares, salvo en la sexualidad y la forma de pensar.
Un matrimonio, con sus hijos bien educados, pueden ser las personas serenas que trato de describir.
Que viva la buena gente, las buenas personas de esta sociedad.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

jueves, 26 de septiembre de 2019

LOS BORRACHOS


Son esas personas que beben, asiduamente alcohol, hasta el punto que pierden la noción de las cosas. Los hay que beben y son pacíficos y no se meten con nadie, pero otros se vuelven agresivos, buscan bronca y les dicen cosas a las mujeres, o las violan.
Los adictos a esta droga, no se contentan con beberse una copa o dos cervezas, tienen que beber hasta hartarse. Lo malo del caso es que luego cogen su vehículo y crean peligro al tráfico rodado. Si se hicieran daño solo ellos, que se apañen, pero pueden atropellar a un peatón o embestir a otro vehículo.
Uno, si no va a coger el coche, puede beberse una copa o dos cervezas, pero no, se beben 5 o 6 copas u 8 cervezas y dan un poquito de asco, porque babean, les cambia el timbre de la voz y quieren saber más que nadie  de cualquier conversación.
Si topan con personas tolerantes, la cosa va bien, pero si lo hacen con personas que no tienen aguante, ya está la fiesta liada. Es vergonzoso tener un carácter así, de borracho y liante.
Los hay que beben solo cuando tienen descanso en el trabajo, pero otros van bebidos a él y corren el riesgo de ser despedidos.
Con lo bonita que es la vida del no bebedor, dialogante de cosas productivas, que llenan a la persona, que hace que se sienta dichosa, que alegran el corazón del que es congruente.
Nada más te bebes una copa, tu cabeza no funciona bien, como es de desear, el trato con los demás no es el mismo.
Si lo puedes evitar, no bebas en demasía, que eso degrada a la persona y además le hace daño a su cuerpo.
Lo más bonito es estar sereno siempre.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

miércoles, 25 de septiembre de 2019

UNA NIÑA Y UN NIÑO


Prácticamente son iguales, solo varía su sexualidad. Juntos juegan a cualquier cosa. Van a la guardería y al colegio, hasta que ya alcancen una cierta edad, que ya los hace muchach@s.
Cuando una pareja decide tener un hij@, dicen que les da igual lo que venga, pero en realidad, la mayoría de los padres prefieren un niño y las madres una niña.
Los niños son más liberales, las niñas más cariñosas, pero ambos son recibidos por los padres con amor.
Yo, de niño, vivía en el campo y allí jugaba con mis hermanos y amigos, e íbamos a la escuela juntos. Yo era muy vergonzoso, pero desde corta edad sabía lo que quería ser en la vida.
Desde pequeño miraba a las niñas como posible pareja, pero ninguna me gustaba en especial.
Entonces, como ahora, niñas y niños estaban juntos en las aulas. Yo era un chico listo, pero mis compañeros se burlaban de mí y me hacían cosas que no son dignas de contar.
Las niñas y los niños deben estar juntos, en sus juegos, en la escuela…para que no se sientan distintos ante la sociedad y lleguen a mayores como personas, no como sexos distintos.
Es verdad que a los niños les gustan unos juegos, como puede ser el futbol y a las niñas la comba o las muñecas, pero hoy día, con la tecnología en juguetes, bien pueden compartirlos.
No se le deben dar a los niñ@s juguetes sexistas. Por ejemplo al niño una bicicleta y a la niña una muñeca, deben ser compartidos, si bien ellos se conforman con poco y se entretienen.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

martes, 24 de septiembre de 2019

VUELTA AL COLE


Por estas fechas están volviendo o ha vuelto ya los niños al cole. Los más pequeños no se adaptan a coger de nuevo la mochila, con libros, cuadernos, lápices de colores…
Los de instituto están hechos a ir de vacaciones y volver a las aulas. Son mayorcitos y saben lo que toca.
A los que les viene largo de verdad, es a los padres que tienen que llevar a sus pupilos al cole. Además de desembolso económico de libros, material escolar, ropa zapatos…y muchas cosas más.
Después de unas vacaciones estivales de más de dos meses, padres, alumnos y profesores tienen que ponerse, de nuevo, en marcha. A algunos les afecta psicológicamente y todo.
Aunque dan mucha guerra, los padres, en este tiempo se han acostumbrado a tener a sus hijos en casa  y ahora cuesta empezar de nuevo. Si trabajan fuera los dos miembros de una pareja, tienen que ingeniárselas, para arreglárselas para compaginar los horarios suyos y la hora de entrar y salir de los colegios.
El que no tiene hijos en edad escolar, no sabe lo que es esto, que si paga la matrícula, que si viste a los niños correctamente (sobre todo si tienen uniforme).
Los niñ@s y los profesores se han acostumbrado a no hacer nada y ahora les cuesta arrancar.
De cualquier forma, para los profesores y escolares, no sería justo que no tuviesen vacaciones. Es lo que más les gusta del curso.
Los que estudian una carrera, ya se las apañan por sus propios medios. Muchos trabajan para pagárselas. Quizá, cuando terminen la carrera, tengan que hacer masters.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

lunes, 23 de septiembre de 2019

MI AMIGO JUAN


Nos conocemos desde hace 30 años, día más o menos, en un psiquiátrico claro. Él vino a vivir en un piso compartido. Allí nos fuimos a encontrar. Paseábamos y tomábamos café.
Yo me hice novio de Lilian, también enferma mental, pero nuestra relación duró poco, porque yo no le convenía. No tenía dinero para mantenerla. Yo le tenía gran afecto y cariño.
Yo tengo más suerte que Juan, pues vivo con mis padres, con el afecto físico y psíquico que eso supone. A Juan se le murió el padre hace poco, pero le queda la madre, que pronto lo acogerá. Esta pertenece a la Jet Set marbellí y Juan también.
Juan es un tío serio y le gustan las cosas bien hechas. Estamos separados en la distancia, pero nuestros corazones caminan juntos. Él me llama casi todos los días, echamos un rato de charla y me da sus deducciones filosóficas de la vida, para que yo se las publique en internet, cosa que yo hago con agrado.
Yo le mando algunos de mis escritos, que le gustan mucho. Él escribe también, es un tío culto y bien hablado. Le tengo que agradecer la deferencia que tiene conmigo al leer mis artículos y comentármelos cuando hablamos por teléfono.
Juan es polifacético. Lo mismo te habla de la vida en general, que de política y asuntos sociales…Es sencillo y amigable. Poco amante de las tonterías…Vamos un amigo de  los que quedan pocos ya.
Yo siempre me he llevado bien con él y ahora, en la distancia, más todavía, porque añoramos los viejos tiempos pasados juntos, paseando, charlando y compartiendo vivencias.
Gracias Juan. Que te vaya bonito.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

viernes, 20 de septiembre de 2019

SE VA EL VERANO


Y son muchas las personas que se alegran, porque han pasado una estación de mucho calor, trabajando o en sus tareas. Se va el verano y con él los días de mucha luz, de playita…
Yo también he pasado calor, pero temo más al invierno de días cortos, de poca luz, de frío, de días lluviosos…Soy un pájaro raro, que se le va a hacer, de todo tiene que haber en este mundo.
El verano también tiene de bueno que vienen los turistas, que dejan dinero y crean trabajo en nuestra ciudad, si bien es verdad que ahora se aproxima el turismo de invierno, los mayores.
Este verano ha sido duro, con muchos días de calor intenso, con muchos incendios forestales, que han arrasado con miles de hectáreas de bosque y matorral. Muchas veces fortuitos, otras veces ocasionados, tristemente, por la mano del hombre.
De quemarlos se acuerdan, pero de reforestarlos no. No hay nadie dispuesto a reponer los pinos quemados, ni Asociaciones desinteresadas, ni del Ministerio de Medio Ambiente.
La estación más bonita es la de las flores, la primavera. No hace frío ni calor y el campo se viste de amapolas y margaritas. También tiene cosas malas, por ejemplo, las alergias.
Lo más bonito de todas las estaciones es llevarse bien (que pesado soy), con la familia y con los amigos e ir haciendo amigos nuevos, para que nuestro tiempo se colme e alegría y felicidad.
En verano se pone de moda la canción del ídem, que suele ser pegadiza y machacona, pero que tarareamos todos, cuando nos sentimos dichosos, alegres o por quitarnos el muermo de encima.
La rueda de las estaciones no para, pronto entrará el otoño…
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

jueves, 19 de septiembre de 2019

BUENA PINTA


Parece que las cosas empiezan a marchar en Al-Farala. Este lunes tuvimos una reunión con el equipo directivo, con la responsable de ocio, Paqui y con el delegado de Faisem en Málaga, Juanfran.
En ella hablemos de solicitar un local más céntrico para la Asociación, si bien es un poco difícil. Se va a presentar un escrito ante el Ayuntamiento de la ciudad.
Digo que es difícil porque tenemos el local en el Puerto de la Torre, realizamos actividades en el centro de la Colonia y en piyayo, de Martínez de la Rosa.
Por estos motivos, no resulta fácil que nos lo concedan. Pese a todo se va a presentar el escrito ante el consistorio, para ver si le buscamos una solución.
Por otra parte, nos han instalado la fibra óptica en el ordenador. Todavía no funciona, pero estoy llamando al técnico, que me ha dicho que, si puede, se pasará un compañero a ver si lo dejamos arreglado hoy mismo. El ordenador funciona normalmente, tan solo le falta imprimir lo que se quiera.
Otra novedad es que se habló de comprar un ordenador nuevo y se dio el visto bueno para que, se compre y se instale. Es de saber que tenemos uno y está un poco pachucho.
Hay que ir renovándose, si se quiere que los compañeros hagan actividades y vengan también aquí.
Otra cosa que se habló es que Alexa sigue de administrativa en Al-Farala, lo que satisface a ella y a nosotros. Ya lleva tiempo siéndolo y hace muy bien su trabajo. Estamos contentos con ella.
Por fin se ve un poco de luz, al final del túnel.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

miércoles, 18 de septiembre de 2019

LAS PRÓXIMAS ELECCIONES


Si no se ponen de acuerdo los políticos, serán repetición de las generales últimas y no parece que vayan a llegar a un acuerdo factible, para todos los grupos.
Serían un desastre con un nivel de participación muy bajo y que retrasan la aprobación de los presupuestos generales, cosa que es ruina para una España que puede ir medio bien.
Yo, particularmente, participaría, pero a buen seguro que muchos no lo harán, cosa que es un error, sobre todo para la clase trabajadora, porque los de derechas votan.
Yo no entiendo de política, ni estoy a la orden del día de esta, pero cualquiera que tenga un mínimo de luz, puede notar que sería la ruina de un país, que, de momento va medio bien.
Todo por ambición de poder, de querer ser más que los demás, pero esto es no satisfacer al pueblo (recuerdo que el poder reside en el pueblo), pero ellos no miran eso sino sus ambiciosos proyectos personales. Se suma el coste de unas elecciones.
Sería del agrado de muchos, que se pusieran de acuerdo y no dejaran tirados a los votantes. Siempre ha gobernado el grupo más votado. Para mí que están, que está mareando la perdiz, a ver quién se lleva el gato al agua.
Es vergonzoso que cada uno quiera hacer lo que le dé la gana, mientras el pueblo observa, incólume, las “palabritas” que se dedican unos a otros mandatarios que, repito, no miran por el pueblo que les votó, sino por intereses económicos de unos y de otros.
Mientras el pueblo observa los devaneos de estos señores/as.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

martes, 17 de septiembre de 2019

HUELGAS


Cada colectivo, sin nombrar a niguno, porque no me interesa, hace huelga reclamando sus derechos (sueldo y condiciones de trabajo), pero ¿piensan estas personas en lo que perjudican a los usuarios de dicho colectivo?
Los usuarios se tienen que aguantar, cuando sus condiciones no serán tan precarias como las manifiestan. Protestan más los que más ganan, los que menos se andan por ahí calladitos.
Las huelgas son necesarias para subir el nivel de vida de un colectivo, pero quizá tienen mejores condiciones que otros.
De ellos deberían aprender y mientras puedan aguantar, estarse calladitos y no salir a armar jaleo y broncas, a la calle, que no traen ningún beneficio a la sociedad, sino más bien lo contrario.
Hoy me he encontrado con unos huelguistas. No hace ni una semana con otros. No creo que esté el país para tanto pedir y llorar por dinero y condiciones laborales, que como digo, suelen ser mejores que las de otros.
Se han aprendido bien el cuento de “niño que no llora no mama”, pues estos se Van a hinchar de mamar, hasta el punto de que no van a caber por la puerta de sus casas.
¿Acaso el que no tiene trabajo sale, en bandadas, a pedir que le den trabajo? No ¿Verdad? Pues estos tienen más razones.
No se ha visto todavía una huelga de indigentes, que no tienen para comer, vestir y pagar los gastos de su casa.
Cuando hay un abuso, por parte de la empresa, si está justificada la huelga, pero solo en casos extremos.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

sábado, 14 de septiembre de 2019

QUE NOS DEN


A todas las personas nos gusta que nos den, que nos inviten, que nos regalen cosas…pero lo contrario no nos gusta nada. Somos muy posesivos. Es justo que si te dan, tú los correspondas.
Hay muchas personas necesitadas, pero no hay ni un pobre que no tenga nada que dar, ni un rico que no necesite nada de los demás. No tienen porque ser cosas materiales, puede ser cariño, amistad, un saludo a tiempo…
Es lógico que el que tiene en demasía de más de lo suyo y reciba menos de los pobres, que sin embargo, te ofrecen lo que poseen. Pues no es así, el rico lo quiere todo para él (con excepciones).
El mundo nos ofrece todos sus bienes y no nos cobra nada por ello. Aquel que pueda, que haga lo mismo. Recibirá en bienes morales, mucho más de lo que se ha sacado de su bolsillo.
Tampoco te digo yo que des todo lo que tienes, sino un poco a quien tú quieras y que lo pueda necesitar. (Para comer…).
Hay que tener mucho cuidado, porque hay quien pide para vicios y te saca lo ojos, si le parece bien. Hay mucho pillo por ahí.
A pesar de los pesares, hay que dar limosna, a quien tú quieras, a Asociaciones Benéficas, que trabajan altruistamente, porque no haya gente en el mundo que pase hambre, sed, calor o frío.
Esa ropa que ya no usas y que está en buen estado, dónala, que hay Asociaciones que se la dan a quien la necesita. Con el mismo trabajo de echarla a la basura, échala al contenedor blanco, instalado a tales efectos.
Está claro que no podemos darlo todo, pero invita a ese amigo tuyo, por ejemplo, te lo devolverá sobrado en bienes del alma.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

viernes, 13 de septiembre de 2019

EL GATO EN EL TEJADO


Todas las noches, mientras nosotros dormimos, un personaje se pasea por nuestro tejado. En el silencio de la noche mira la vida pasar, sin grandes preocupaciones. Tan solo necesita comer, beber, hacer sus necesidades…y buscar una compañera para procrear y que siempre haya descendencia suya.
Tan solo teme a los perros, que pueden hacerle daño o matarlo. En la realidad, su vida es muy parecida a la de las personas, solo que ellos no tienen que trabajar. Gusta de la compañía de nosotros, o sea, como nosotros busca el cariño de los demás.
No lo maltrates, sino más bien, cuídalo, que será un amigo más en tu repertorio, que con poco se contenta, al contrario de los humanos, que necesitamos mucho y aun así no estamos contentos.
Los animales son seres vivos como nosotros, a veces están tristes, a veces pletóricos. De ellos tenemos mucho que aprender, pues como digo, con poco se conforman y viven más felices que nosotros, en su mundo, que es el nuestro, que es el de tod@s.
Ese mundo que todos debíamos cuidar y no lo hacemos, por pereza, por falta de escrúpulos comerciales, dice la canción, deberíamos ser civilizados como los animales, que no ensucian sino lo preciso y no contaminan el ambiente, cosa que nosotros si hacemos y no ponemos remedio a ello.
El hombre es el único animal que tropieza dos veces con la misma piedra. Que razón tenía nuestro querido amigo y amante de los animales, ya desaparecido, Féliz Rodríguez de la Fuente. Él no le haría daño ni a una hormiga, porque esta no le hace daño a nadie.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

jueves, 12 de septiembre de 2019

EL PODER DEL DINERO


El vil metal hace que se mueva todo el mundo. Se trabaja por dinero, se compra con él, vamos que sirve para todos los proyectos, que se quieran realizar en esta vida.
Si no tienes dinero, no tienes opción a nada. Apenas si puedes salir de casa, porque para cualquier cosa a la que quieras acceder, hace falta dinero, sino no te dan nada y se precisa mucho en una casa de familia. Que si comida, que si ropa, libros para los peques, que si productos de limpieza y aseo y mil cosas más.
Yo creo que lo único que no tiene impuestos, todavía, es salir a la calle, pero pronto los crearán. Todo lo que consumimos lleva sus impuestos. Como para que los políticos no nos defiendan.
Es como una obsesión. Necesito dinero, todo vale caro y el bolsillo del pobre da para poco, pero nos tenemos que apañar cada un@. Si tenemos más, aún nos faltará, porque lo gastaremos.
Muchas veces, nos gastamos el dinero en cosas que no nos sirven. Eso es derrochar y no está al alcance del trabajador.
Dicen que el dinero no hace la felicidad, pero ayuda. No podemos comer, pagar los gastos de la casa: luz, agua, butano, seguro de decesos, contribución, hipoteca o alquiler.
A los que tenemos un poco, todos nos piden, para café, para comer y nosotros no somos un banco.
A todos nos gusta lo bueno, lo bonito. El dinero debe ser nuestro servidos y no al contrario.
Cada domingo, nos gusta comer fuera, sobre todo si la mujer de la casa trabaja fuera. Darle ese gusto y que ese día no tenga que fregar  los platos.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

miércoles, 11 de septiembre de 2019

EL CÁNCER DE MAMA


La palabra cáncer es un término muy amplio, que abarca más de 200 tipos. Cada uno de ellos posee características particulares, que en algunos casos son completamente diferentes del resto de cánceres, pudiendo considerarse enfermedades independientes, con su causa, evolución y tratamiento específico.
El cáncer de mama, es el crecimiento descontrolado de las células mamarias. Para entender mejor el cáncer de mama, debemos entender cómo se desarrolla cualquier tipo de cáncer.
El cáncer es el resultado de mutaciones, o cambios anómalos, en los genes que regulan el crecimiento de las células y las mantienen sanas.
Los genes se encuentran en el núcleo de las células, el cual actúa como sala de control de cada célula. El término “cáncer de mama” hace referencia a un tumor maligno, que se ha desarrollado en partir de las células mamarias.
Generalmente, el cáncer de mama se desarrolla en las células de los lobulillos, que son glándulas productoras de leche, o en los conductos que son vías, que transportan leche desde los lobulillos al pezón.
El cáncer de mama se origina como un error en el material genético.
El hecho de desarrollar cáncer de mama, no es tu culpa ni la de nadie. Sentirse culpable o pensar que es el futo de cosas que hiciste, es un error.
A partir de los 40 o 45 años y hasta los 65, todas las mujeres pueden y deben, hacerse revisiones periódicas, para detectarlo.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

martes, 10 de septiembre de 2019

LA GUERRA DE LOS COCHES


Ya lo decía mi abuelo, que lleva más de 30 años en el otro mundo: “la próxima guerra será la de los coches”. Y que razón tenía mi antepasado. Los coches parecen que se van a comer el mundo.
No solo los coches, las motos, bicicletas, patinetes y toda suerte de artilugio con ruedas. Van como locos, paran donde les parece, se tiene que andar uno listo para que no le atropellen.
Les da igual estorbar al tráfico rodado. Aquí, para subir o bajar viajeros. Cargar o descalgar bultos, tomarse un café o un helado… Yo pongo la doble intermitencia y que cada uno se las arregle como pueda. No tienen consideración con los demás, que si fuera al revés, ya está tocando el claxon exageradamente.
Con las obras que hay en la ciudad, hay una cantidad de despistados, que no saben para donde van a tirar.
Hay tanta cantidad y diversidad de vehículos y peatones, que se hace difícil circular por las calles. Los profesionales se desesperan ante tanto despistado, que no sabe si va hacia el frente, la derecha o la izquierda.
Es una verdadera guerra de vehículos de todas clases, que todos llevan prisa, excepto cuando van buscando una tienda, un bar o van a recoger o bajar algún ocupante del coche.
Si los coches hacen lo que quieren, los peatones hacemos lo que nos da la gana. Unos y otros se saltan los semáforos.
El conductor o conductora que lo es, circula con precaución, cede el paso a vehículos y peatones, cuando no le entorpece su marcha, se hace ver para que otros no se crucen sin precaución, no es maleducado, no toca el claxon exageradamente a un despistado.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

lunes, 9 de septiembre de 2019

UN HOMBRE DE VERDAD


No es ese que presume de machote y en cuanto tiene un problema, es un corderito que entra por todas, enfrente del que es un mequetrefe, que nada sabe de la vida, que es un chulo de tres al cuarto y que no es capaz de tomar una decisión propia de un valiente.
Ese que es muy atrevido en los bares, entre copas, no es nuestro hombre. El que lo es, es el que no se achanta, cuando las cosas van mal: por falta de trabajo, problemas con su esposa o hijos, con una mujer que no sabe estar en su sitio.
Entonces es cuando el hombre tiene que actuar, con inteligencia, serenidad, buena vista y dialogando, decir qué se debe hacer.
Me tacharéis de machista, pero en esta sociedad, que la mujer quiere llevar los pantalones, para que no se le caigan, deberá hacer caso a su marido. Siempre teniendo en cuenta los pro y los contra de cada caso. De contrario esa familia irá a la deriva.
Un hombre está para servir a su familia, pero no para que le tomen el pelo a las primeras de cambio y venga a ser un juguete de su mujer y de sus hijos, a los que debe querer y respetar.
A la hora de cambiar de domicilio, por ejemplo, la mujer se fijará en lo lujoso. El hombre valorará si esa casa les conviene, por precio, vecinos, cercanía de centros educativos…
Al final, muchas veces se hace lo que dice la mujer, lo que es un error garrafal, porque ella mira lo lujoso, no lo práctico.
Es este el momento en el que el hombre, debe sacar a flote su gallardía (ojo que debe ser de mutuo acuerdo) y decir qué se debe hacer y que no se venga abajo, por los ruegos de su esposa.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

sábado, 7 de septiembre de 2019

UNA MUJER Y UN HOMBRE


Son el cóctel perfecto para vivir juntos toda la vida. Se conocerán muy jóvenes, primero serán amigos, luego novios y si la cosa bien, serán pareja para siempre.
Tanto el uno como la otra tienen sus virtudes y sus defectos, pero si hay amor de por medio, se superarán y vivirán felices largos años, que no son largos si se compenetran bien.
Lo de menos es el sexo, si hay cariño, con una mirada se lo dicen todo. Se contarán hasta lo más íntimo de cada uno se ellos, como una cosa natural, porque en pareja no hay secretos.
Una caricia, un roce, un beso, una carantoña, son el principio de un idilio que acabará en la cama, pero no por disfrutar, sino por llegar al culmen del amor, que es el sexo.
Sin prisa, con todo el tiempo y el cariño del mundo, hombre y mujer se verán uno frente al otro. Se desnudarán entre besos y caricias. Se están preparando para el acto sexual, que hará que los dos sean uno. Con juegos y con mucho amor coabitarán.
Si de esta unión va a salir un embarazo, es lo que desean y quieren ser padres. Sino, el cariño es el mismo, los hijos vendrán cuando llegue su momento y siempre de mutuo acuerdo.
En la sociedad actual española. Pocos y tarde deciden ser padres, porque se precisa mucho, ambos trabajan y los niños necesitan muchos cuidados y son un gran gasto, extra para la economía familiar. Pero son tan dulces, tan cariñosos que más tarde o más temprano, se deciden y la pareja encarga un bebé a la cigüeña.
La vida con niños cambia los hábitos de la pareja. Ya tienen que estar pendiente a ellos y cuidarlos, en el más amplio sentido.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

viernes, 6 de septiembre de 2019

LA FIESTA NACIONAL


Es, sin lugar a dudas, la tauromaquia. No hay solo las corridas de toros, también están los rejoneos, los san fermines, el toro embolao y otras prácticas que yo desconozco, porque no soy aficionado.
En todas ellas se hace daño a los toros, que no le han hecho mal a nadie. Yo no estoy a favor de ninguna de ellas, porque en todas se hiere o mata  a estos animalitos a sangre fría.
En una corrida de toros, se marea a estos y luego el picador, con la puya, lo hiere en el lomo de gravedad. Luego el torero lo lidia con el capote. Más tarde le ponen tres pares de banderillas, mientras el toro sangra abundantemente.
Lo marean entre capotazo y capotazo y cuando lo tienen rendido, el torero coge la espada de matar. Lo engaña con el capote y le inca dicha espada en el lomo, que si es certera acarreará la muerte del toro. Es de cobardes.
Según el público y la presidencia por la lidia del animal, le concederán una o dos orejas al torero y si ha sido muy buena, le darán también el rabo y saldrá, “triunfante”, a hombros por la puerta grande. Puede sentirse “orgulloso”.
Y digo yo: ¿Le gustaría al torero que le hicieran lo que él le ha hecho al toro? Yo creo que no, por lo tanto que no se las tenga de valiente, por haber matado a un animal poquito a poco.
Existe el dicho de que, si no hay corridas de toros bravos, estos desaparecerán. Los pueden criar y servir de pareja a las vacas.
Todo ello es un puro negocio que enriquece a muchos. Ya se han prohibido las corridas en algunas ciudades. Que los dejen en paz.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

jueves, 5 de septiembre de 2019

EL TRABAJO


Dice un dicho “mira si es malo el trabajo, que tienen que pagarte para que lo hagas”. Esto es el colmo de los vagos y de los aburridos, porque trabajar, además de darnos dinero para todas nuestras necesidades, hace que la persona se realice, que se sienta bien por la tarea que realiza.
Si se trabaja en exceso, si es malo, porque atenta contra nuestra salud física y psíquica y no podemos disfrutar, por mucho que ganemos, de nuestro salario.
Es cierto que es malo, en algún sentido, porque el que paga, exige y nos hace realizarlo a disjusto, cuando a la mayoría de la gente le gusta hacerlo a conciencia, o sea bien, no con prisas y a lo loco. Esto hace que no estemos contentos con nuestro trabajo.
El trabajo, bien hecho, es sano, porque nos pone a prueba de lo que somos capaces de hacer, movemos el cuerpo, que también es sano y hace que no nos aburamos y no sepamos qué hacer.
Cualquier trabajo es bueno, porque, si nos gusta, disfrutaremos haciéndolo, nos relacionaremos con compañer@s, haremos amigos nuevos…Yo no concibo una vida, sin una tarea que realizar.
Desde jóvenes tenemos necesidades y para eso tenemos que trabajar, vamos que nadie te va a regalar el vil metal.
En una sociedad como la nuestra, globalizada y consumista, se necesita mucho. Si desde joven trabajas, tendrás que hacerlo duramente y si estudias una carrera universitaria, te la tendrás que pagar, siempre en el caso de que tus padres no sean pudientes.
Tampoco digo yo que trabajemos en demasía, porque para cuando tengamos 45 o 50 años, ya nuestro cuerpo fallará y no podremos seguir haciéndolo hasta nuestra edad de jubilación, que en España es de 65 años, más o menos.
La persona que le gusta su trabajo, no le pesa, lo hace a gusto y rinde más para su empresa. Él/ella está contento y sus jefes los aprecian y se portan bien con él/ella.
                                                   JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

miércoles, 4 de septiembre de 2019

NOS GUSTA VIAJAR


Cuando cogemos las vacaciones, lo primero que nos planteamos es que a dónde vamos a ir este año. Apañamos las maletas, los niños y la suegra (si cabe), en nuestro utilitario y nos ponemos rumbo a ese sitio que tanto nos gusta.
En verano, lo más frecuente, son los destinos playeros para bañarse, tostarse al sol y comer en restaurantes junto al mar. Mi amigo José Juan Asenjo, me ha propuesto que hable de este tema y ahí va, espero que te sientas satisfecho cuando lo veas publicado.
Los destinos suelen ser la Costa del Sol, La Costa de Huelva (Mazagón y Matalascañas), la manga del mar menor, Peñíscola en Valencia, Baleares, Canarias y porqué no la costa Norte de España. También Cataluña.
Esto si nos referimos a turismo de playa (nacional), pero hay muchos lugares en España, de interior, que son preciosos, como el valle de los pedroches, la Sierra de Cazorla, Los Pirineos, el camino de Santiago, Galicia, Salamanca, Segovia, Zamora, Burgos y muchos más, donde podemos encontrar esa paz que se busca en vacaciones.
Todo esto en cuanto a turismo nacional, pero si lo que queremos es visitar otros países, hay cientos de destinos donde lo podemos pasar bien como en Italia, Venecia, Turquía, Egipto, Thailandia, Sudáfrica, Francia, Inglaterra, los países bajos, Venezuela, Argentina, las Bahamas, EEUU.
Eso por mentar algunos, pero hay muchísimos más, todo depende de nosotros y del dinero que dispongamos.
También se puede hacer un crucero, con escala en distintos países, para pasar nuestras vacaciones como unos señores que somos, conocer otras culturas, hacer compras, hacernos fotos junto a los monumentos que visitemos, grabar vídeos con el móvil…
El viajar es un placer que les gusta a muchas personas. Para ellos es un aliciente conocer gentes de otras ciudades o países, olvidarse de la rutina del trabajo una vez al año. Disfrutar de las merecidas vacaciones que nos dan en el trabajo.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

martes, 3 de septiembre de 2019

SÍNDROME POST VACACIONAL


Con el fin del verano, llega el fin, para muchos, de las vacaciones del trabajo y también del colegio. Todo ello era tan bonito, que parece mentira que pueda, de pronto, terminar. Señal que el verano se nos va y con él la playa, los chiringuitos, los pescaitos fritos o en espetos.
Cuando más a gusto estábamos, a nuestro aire, nos damos cuenta, de que tenemos que volver al trabajo o al colegio. Es duro, pero hay que asumirlo. Todo lo bonito termina pronto.
Para muchos es un trauma psicológico, tener que volver a trabajar. Que le vamos a hacer, la vida es así de dura. Demos gracias a que tenemos colegios, en los que estudian nuestros hijos, que les dan vacaciones y demos gracias a que tenemos un trabajo, más o menos bien remunerado, en el que nos dan un mes de vacaciones pagadas.
No todo el mundo lo tiene. Hay quien trabaja sin derecho a nada, ni pagas extra, ni vacaciones, ni seguro para el médico. Hay mucho engaño en el mundo del trabajo.
El derecho a la educación debería ser para todos igual, pero no, el que es buen estudiante, tiene derecho a becas, con las que se paga sus libros y utensilios, para estudiar su carrera.
El que tiene malas notas, se lo tiene que pagar todo de su bolsillo y cuesta caro todo, la matrícula, los libros  y los utensilios para hacer su carrera universitaria, que si es de músico, por ejemplo, vale cara.
Pero vamos a lo nuestro, el fin de las vacaciones, que fueron tan bonitas como cortas, muchos cogen depresión y todo, cuando ven que tienen que volver a trabajar.
Peor sería, como dije antes, que no las tuviésemos. Todo el año currando y las vacaciones se las come el jefe y las pagas extraordinarias, ídem de lo mismo. Los días de asuntos propios, eso no se sabe ni lo que es.
Hagamos lo posible de que las cosas sigan como están y no empeoren y no haya trabajo, ni vacaciones para nadie. Todo depende del Gobierno.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

lunes, 2 de septiembre de 2019

MERECIDO DESCANSO


Dice un dicho: “mira si es malo el trabajo, que te tienen que pagar para que lo hagas” y tiene mucha razón, los trabajos son cansados, monótonos, aburridos y mil cosas más.
Por estos y otros motivos, estamos deseando que llegue nuestro descanso. Después de cinco, seis o siete días de agotador trabajo, tenemos más que merecidos, dos de descanso. Para pasarlos con la familia y hacer algo diferente, por gusto, de ocio y tiempo libre.
Lo más normal es que queramos pasarlos en casa, con la familia, salir con ellos a dar un paseo. En una palabra: hacer cada uno lo que le dé la gana, sin obligaciones que no nos agradan.
Yo también espero, con ansiedad el día de mi descanso, que es el domingo y lo voy a pasar con mis amigos Pepe y Antonio. Desayunaré con Pepe y más tarde nos iremos a almorzar al jardín. Lo pasaremos bien, seguro.
En las empresas grandes exigen mucho, pero dan sus descansos al personal y todos sus derechos: pagas extraordinarias, si echan horas extra, se las pagan bien, dan sus días de asuntos propios, permiten que los compañeros cambien el turno, porque así les convenga…
Nada de esto tienen los asalariados de empresas pequeñas, que suelen pagar poco a sus empleados.
Los aseguran por menos horas de las que trabajan. Vamos que abusan de ellos todo lo que pueden y más. No les pagan horas extra, que si echan.
El descanso es un derecho de todo trabajador, que debe exigirle a su empresa, sin titubeos, que ellos bien que exigen, que trabajen más de lo permitido y si no les conviene los despiden y ponen en su lugar a otros que trabajen más y no se quejen.
Los inmigrantes tienen mucha culpa de que no haya empleo de calidad. Porque trabajan por lo que les den y no se quejan de las condiciones infrahumanas en que son contratados. Como vienen con lo puesto, cualquier cosa es buena. Con un sueldecillo y un seguro, se conforman.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.