EL ZAMPÓN QUE NO COMÍA

 

EL ZAMPÓN QUE NO COMÍA

16-09-2022

Esta es la historia de un chico que no comía, se lo zampaba todo. Comía con ansias, como si le fuese a faltar y así estaba hecho un cochino de engorde de gordo y rechoncho que lucía su cuerpo.

Para mí mamá que al hermano no le hace falta a mí sí, mírame esbelto y canijo que estoy mientras mi hermano luce dulces carnes. Échame aquí en mi plato una ración más que encanijo.

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Lo mío por la comida no es devoción es obligación, tengo que estar ancho y fornido para que me vean las chicas guapetón y que me salgan dignas novias rellenitas como yo, llenas de chicha y tocinete

Lo mío no es burrear, es una necesidad imperante de estar rellenito y guapo para que me salgan mil novias, rellenitas como yo y que nos case un cura zampón para bendecirnos en…..

…nuestro espíritu y nuestra carne y que tengamos hijos zampones como nosotros, que coman mucho y bueno y sean buenos tragaldabas que se comen las piedras si es necesario.

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Lo importante es estar gordo y relleno y no canijo y asqueroso, como hay tantos por ahí, que se los lleva el viento si sopla un poquito fuerte hay que estar fuertes y fornidos y bien rellenos.

 La ley del zampón: come todo lo que puedas mientras quede un hueco en tu barriga, que si no vendrá otro y se lo zampará todo y tu pobre estomaguito quedará como un nido de telarañas.

JOSÉ ANTONIO MÉRIDA JUÁREZ.