No tienes que ir a buscarla a ningún sitio, está en tí, en tu
forma de reaccionar a los problemas y como ingeniártelas para ser feliz junto a
tu familia, compañeros y amigos.
La cuestión es no hacer daño a nadie, ni que te lo hagan a tí.
Ayudar en lo que puedas a los amigos, querer a la familia, trabajar con tesón,
respetar a todo el mundo.
No hacer caso de falsos augurios y vivir tranquilamente la
vida, que es mucho y no meterte en problemas, que a ningún sitio llevan.
La felicidad está en los pequeños momentos, que no se
repiten, ni hay que buscarlos, vienen solos cuando menos te lo esperas.
No merece la pena amargarse por un problema. Analízalo y con
paciencia encontrarás la solución. No intentes vivir por ti solo, ten en cuenta
a los demás.
Di no a los vicios, que solo traen problemas. Yo, por ejemplo
fumo y estoy arrepentido de ello, pero puede más que yo. No soy capaz de
quitarme y eso que he porfiado.
Pasea con la familia y amigos. Queda para tomar algo y luego
a casita, que es donde mejor se está. Quiere a tu mujer y a tus hijos, que son
valiosos tesoros que te han dado.
Ama sin límites, que el amor es como un globo, contra más
soplas, más grande se pone y a este se unen otros globos, que llenan de
felicidad a tu persona y a tu familia.
El respeto es la base del amor y de la felicidad. Gasta
bromas, pero no pesadas que puedan molestar al contrario.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.
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