viernes, 31 de mayo de 2019

EL REY DE LA CARRETERA


Es aquel que circula con precaución, respeta las normas y a los demás conductores y peatones. No va demasiado rápido ni demasiado lento, según por la vía que se circule.
Da paso a otros que quieren incorporarse a la vía. No se pone nervioso cuando el tráfico está malo, cuando hay atascos. Ya lleve un vehículo de gran tonelaje, un turismo, una moto o un patinete eléctrico, no molesta a los demás conductores.
No usa en exceso el claxon como protesta a la maniobra indebida de un conductor o peatón. No se irrita por nada. No presume de ser buen conductor, sino todo lo contrario.
No presume de llevar un buen coche, los demás también son buenos. No para ni aparca en lugares prohibidos o donde estorbe a otros conductores.
Mantiene su vehículo en perfectas condiciones para circular y lo tiene limpio. No bebe alcohol ni toma drogas, ni habla por el móvil, ni fuma mientras o cuando tiene que conducir. No habla acaloradamente con los demás ocupantes del vehículo.
No protesta si se le cruza un peatón o un vehículo. Solo trata de evitar el accidente por todos los medios posibles. No hace maniobras peligrosas para él o para los demás. No avasalla con su vehículo.
No come ni bebe mientras está conduciendo. Su ley es superior a las normas de tráfico. Su lema es seguridad al volante. No juega con sus niños mientras conduce, ni con su novia o esposa.
No va mirando a las niñas con falda corta y escote generoso. Siempre lleva el cinturón de seguridad y las luces encendidas, aunque sea de día.
No toma café ni excitantes para conducir. Presta toda la atención a lo que está haciendo, conducir.
No escucha música ni el partido de su equipo favorito.
Si eres así eres un buen conductor o conductora.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

No hay comentarios:

Publicar un comentario