Es bonito conocer una chica que se interese por uno. Las hay
a patadas, pero sencillas, guapas y apañadas, son las menos. Enamorarse es lo
más bonito que puede ocurrirle a una persona. Sin querer se irán estrechando
los lazos hasta que llegue el día en que le dices: “te quiero”. Entonces ya has
perdido los papeles. Estas perdid@, porque tu vida, de pronto ha cambiado
completamente.
Una mirada y un gesto amable es suficiente, para que un se
fije en una chica y al revés. De ahí a la boda es todo pan comido. Se besarán
miles de veces y el cariño irá agrandando. Las chicas son muy sensuales y
cualquier cosa les hace fijarse en un chico.
Una pareja no debería discutir fuertemente nunca. Las
palabras pueden arreglarlo todo. Siempre que uno no quiera, no habrá discusión.
Si conoces a una chica y te interesa, acompáñala a donde
vaya, invítala a un café o a un helado y ya la tienes en el bolsillo. Las
mujeres son muy agradecidas y más fieles que los hombres, por lo que no se explica el hecho de que tantas parejas se
separen.
Ante un problema de calado, lo mejor es el diálogo y el buen
entendimiento de ambos para solucionar la disputa. A veces un “lo siento” o un
“perdona cariño” lo arreglan todo. Es cuestión de no ser demasiado rebelde y
hablarlo todo. Hasta la más pequeña cosa se soluciona con palabras. Que no
cuesta dinero hablar y llegar a un entendimiento.
Un buen hombre, una buena mujer, daría la vida por la persona
amada. Solo pensando “esto no le gusta a él o a ella, pues no lo hago”. Me
trago el orgullo y asunto solucionado.
Es verdad que, en la pareja, hay que aguantarse mucho, pero
merece la pena, porque aumenta el cariño y hace fuerte, grande ese amor que un
día nació y que no morirá jamás.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.
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