lunes, 8 de julio de 2019

MIS CONTACTOS


Tengo entre cincuenta y sesenta contactos a los que les envío mis escritos y a los que quiero darles mis más sinceras gracias por leerme. Me consta que algunos no lo hacen, pero la mayoría si, lo que es un gran motivo de gozo para mi alma.
Nada me llena más de alegría que, cuando hablo con alguno me dice que le ha gustado lo que he escrito sobre tal o cual tema o me lo hace saber por internet.
Yo sé que hay muchos más que le gusta de leerme y lo suelen hacer en Facebook, donde están todos mis artículos. Alguno también me lo dice cuando nos vemos por la calle, lo que es vinagre para mis heridas.
Entre ellos están amigos personales, compañeros de la EMT, asistentes sociales, compañeros de Al-Farala…Muchos no me conocen de nada, solamente el hecho de ser compañeros les hace darme su correo, cosa que yo agradezco con el corazón.
Hay quien me lee a diario, otros menos, otros cuando les gusta un artículo dado, pero todos lo hacen con cariño y si no les gusta, pasan página y a otra cosa mejor.
Los hay que no tienen correo electrónico y les gustaría tenerlo, entre otras cosas por leerme.
Mi único propósito es no defraudar a nadie. Si alguien piensa que es basura, pues lo será para él, pero ha de saber que muchos que leen mis artículos, les gustan y son mi punto de apoyo. Hay quien lee uno y dice para sí: ”ya los he leído todos”, otros les gustan algunos de ellos, con eso me siento satisfecho. Yo soy consciente de que no soy escritor y que no tengo un vocabulario muy amplio y es que tengo pocos estudios.
Yo les agradezco sinceramente a los que me hacen saber que les ha gustado uno de mis artículos, porque ello me anima a seguir escribiendo.
Cada día se incorpora algún contacto más. Hoy es Alfredo de la EMT, al que doy las gracias por su deferencia.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

sábado, 6 de julio de 2019

LA MADRUGÁ


Para los que se acuestan temprano como yo, es un tiempo largo, pues después de asearte, desayunar y poco más, tienes un tiempo muerto, que no sabes que vas a hacer.
Hoy me he levantado temprano y después de hacer mis cosas me he puesto a escribir sobre este tiempo en que, casi  todo el mundo está dormido, salvo alguno que empieza temprano su actividad laboral.
He estado preparando para echar el día abajo, pero el reloj corre poco en este tiempo libre, que ya no sabes que vas a hacer. Me he fumado unos cigarritos. He estado arreglando y ordenando facturas del agua, de la luz y de la contribución de la vivienda, no vaya a ser que luego haya malos entendidos y nos reclamen algo que hemos pagado ya.
Cuando termine de escribir me pondré a oir la radio, a ver que nuevas noticias nos trae el día, que está por llegar. Los deportes, el tiempo, la política y tantas cosas que se cuentan en la radio.
Todo transcurre despacio, en silencio y no se ve un alma por ahí. Tan solo ha pasado un coche y mi amigo Bernardo que empieza temprano la jornada en Limasa, donde trabaja de engrasador.
Menos mal que estamos, como aquel que dice, en verano y los días son largos y pronto la luz del sol alumbrará el Cielo y en la ciudad empezará la tarea diaria para cada uno. Mis padres duermen, pero pronto se levantarán a ver de qué va el día hoy. La madrugá es un tiempo bonito, porque haces lo que quieres y nadie te molesta. Pronto vendrá mi hermano Paco a desayunar, que tiene muchas tareas que hacer y tiene que empezar pronto.
Ya parece que vienen los primeros rayos de luz del día, que esperemos que sea productivo para todos, cada uno en su tarea.
Mi madre estaba ayer pachucha. No sé si la tendremos que llevar al hospital. La lleve y era depresivo, porque ayer discutí con mi hermano Paco y a ella le gusta que nos llevemos todos bien, seguiré mi tarea diaria de ir a Al- faralá y escribir mis artículos en el ordenador. Por la noche, mi madre estaba un poco mejor, pero le han mandado pastillas fuertes.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

viernes, 5 de julio de 2019

MIEDO


Me dan las personas que creen saberlo todo y luego resulta que no saben nada. La sabiduría es un don que tenemos todas las personas, unas más que otras, pero debemos saber utilizarla.
Hay que saber cuándo se debe hablar y qué se debe decir, porque hay palabras que hieren y nuestro prójimo no se merece que se las digamos. Otras veces nos quedamos callados y es entonces, quizá, cuando deberíamos hablar, poner las cosas claras y no tener miedo de nada, ni de nadie, porque son personas como nosotros.
La persona que es legal, no tiene miedo de nada, porque va por su camino y hace las cosas según su conciencia se las dicta. Va con la cara alta deseando encontrarse con sus amigos y conocidos.
El miedo es la serpiente, que saca la lengua en señal de que va por mal camino, deseando devorar a cualquiera que pase. Lo mismo les ocurre a las personas, que vamos a ver a quién le damos el sablazo.
No tiene miedo el que cumple con su obligación y hace su trabajo a conciencia, poniendo todo lo bueno que hay en él para servir a su prójimo.
En el trabajo nuestro es donde debemos demostrar nuestra valía, haciéndolo lo mejor que sabemos, con gallardía, con ánimo y con buen hacer. Haciendo favores. Yo no trabajo ya, pero cuando lo hacía, era con gusto de servir a mis jefes y a mis viajeros, que agradecían tanta bonanza cuando, quizá no los conocía de nada.
Mi ocupación era vocacional, lo que ayuda a hacer bien las cosas y con alegría.
Miedo es no saber lo que se va a hacer en un momento dado, a temer los de los pasan por nuestro lado, a saber que no se está haciendo lo que se debe en su momento.
Es cuando podemos hacer una cosa bien y hacemos lo contrario.
Miedo es una palabra muy fea, que no debemos pronunciar y sobre todo hacer sentir a nuestros conciudadanos.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

jueves, 4 de julio de 2019

EL HIJO DEL VIENTO


Era un muchacho casi normal, que tan solo tenía la propiedad de desembrujar a las brujas y quitarles su mal. Era maduro como hombre y como hijo de este fenómeno.
Andaba por las calles como otro cualquiera y nadie lo echaba en ver porque era de lo más normal que existe, eso si teniendo como propiedad el desembrujar, como hijo del viento y las tempestades, que eran su padre y su valía.
Si te encuentras con él no lo echarás en ver, porque es de lo más normal que existe. Su propiedad era sembrar el bien por donde quiera que iba o venía.
Su padre era el viento y su madre la calma, por lo que lo hacían un hombre educado, valiente, sin miedo, sin vergüenza por nada, que se dedicaba a apasiguar los malos vientos y traer la calma allí donde había tempestad, furia de hombres.
Las gentes lo querían porque era educado, bien parecido y luchador por los cuatro costados. Venía a ser un Juan sin miedo de nada porque el viento le protegía y las tempestades eran sus amigas. No sabía de odios ni rencores, su don era la paz.
Tenía varios hermanos, pero ninguno tenía la propiedad de él, eran fieras, pero como corderitos que se amedrantan ante cualquier desavenencia de la vida en este mundo.
Sus padres terráqueos eran mansos y compresivos con la lucha de su hijo de salvar al mundo. Lo comprendían y dejaban que hiciera, lo que mejor se le ocurriera.
La vida transcurre lenta, pasa por nuestros cuerpos y mentes, dejando el rastro del viento, que lo delata todo. Es como un paraíso sin nombre.
El viento, como todos los fenómenos atmosféricos pasa por nosotros sin dejar  rastro ni huella en nuestro cuerpo. El hijo es el dueño de los vientos y tempestades que caminan por nuestro lado.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

miércoles, 3 de julio de 2019

CAMINA O REVIENTA


Es el título del libro que escribió Eleuterio Sánchez “el Lute”. Cuanto debe saber ese hombre de la vida y del destino. Me imagino yo que con estas palabras quiere decir que hay que coger un camino y seguirlo siempre, mientras puedas.
Hay que luchar y luchar mientras se pueda, cuando no puedas, revienta, que la vida sigue muy a pesar nuestro. Nuestro caminar es duro, pero más duros debemos ser nosotros. Hay que trabajar por lo que se cree, mientras nos quede un soplo de vida.
Si no luchas, no eres hombre digno de la vida. Elige un camino y no lo dejes jamás. Camina o revienta, como dice Eleuterio, que la vida es de los luchadores, de los que se dejan el pellejo, cada día, en el caminar en este mundo de espinas y malas yerbas.
Camina por duros que sean tus pasos, que no se diga que no eres luchador. Lucha por aquello que crees justo, que no es la ley de los hombres. Eso es una trampa para bobos, que andan deambulando por caminos extraños. La Ley del luchador son sus pies y sus manos, con los que trabaja incansablemente hasta triunfar o morir.
Estoy hablando de un delincuente, pero qué son los políticos que se llevan el dinero del pueblo y luego nos hablan de ley y de recursos para los pobres. Merecen la cárcel de por vida por engañar a los que debieran defender y no robar descaradamente al que luego le vota para que sea alcalde, diputado, concejal o presidente de alguna opción política.
Trabaja hasta reventar por los más pobres, que luego te votarán para que ganes el sueldo desde un sillón, cómodamente y sin trabajar duro.
Esto es lo que hacen los obreros para construir un mundo un poco mejor.
Cada uno tiene su puesto en la vida, lucha por él, porque alguien diga: ese hombre es bueno, que vive de su salario y que no roba a los pobres, sino que los ayuda y da la cara por ellos. Que vivan esos hombres, que tengan salud y suerte.
Quiero rendir un homenaje a este hombre, que luchó por los pobres.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

martes, 2 de julio de 2019

TODO LO QUE SÉ


“Daría todo lo que sé por la mitad de lo que ignoro”, decía un afamado científico y yo le digo que hay que conformarse con la sabiduría que tiene uno. Cada cual entiende de sus cosas, de su trabajo, de su dedicación y es sabio en ellos. Cuanto más trabajos más sabio.
La sabiduría nos la ha dado Dios para que la usemos, con nuestra familia, en el trabajo, con los amigos y conocidos. Hablando dos personas, juntan sus conocimientos y se hacen, mano a mano, más sabios los dos.
No hay que ser acaparador y querer ser el mejor del mundo, ese lo es el más insospechado, que anda de acá para allá sin presumir de nada. Se limita a hacer su trabajo lo mejor que sabe y no presuma con nada ni con nadie. Es un personaje polifacético, que dedica su vida a los demás. Puede ser una persona que pasea tranquilamente por las calles, saludando a todo el que se precia. Da lo que  tiene a los que se lo piden, sin dejarse engañar por mucho pillo que haya por ahí suelto.
Se deja aconsejar y aconseja a quien lo pudiera necesitar. Se deja aconsejar porque se siente inferior y aconseja a los que lo puedan necesitar, que son muchos por las calles.
Todo lo que sé me lo ha enseñado la vida. Aprende tú de ella con las vivencias de cada día, que son una escuela de maestros. Vive la vida siendo siempre alumno, nunca maestro. El alumno vive aprendiendo continuamente y pronto será un pequeño maestro, que nunca para de aprender incluso de sus propios alumnos.
Ahí está el quis de la cuestión, en no parar de aprender, porque cada persona es sabia en sus conocimientos y vale la pena aprender de él.
 El más pequeño puede ser el más grande en los avatares de esta vida.
Todo lo que sé lo aprendí de ti, de tu proceder ante las situaciones de la vida, que es cruel con los más desdichados y más noble con los pudientes, cosa totalmente injusta, pero este mundo es así.
Conquistar al mundo quisiera, pero me siento tan pequeño, que no me atrevo a poner manos a la obra.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.

lunes, 1 de julio de 2019

1ª OLA DE CALOR


En España y prácticamente en toda Europa. Las temperaturas superan los 40 grados y se han provocado varios incendios en Madrid y Cataluña, que ya han devastado un buen número de hectáreas y han tenido que ser desalojados muchos vecinos.
Aquí, en Málaga capital nos estamos salvando de momento. Andamos por los 30 o 32 grados previstos para mañana. Esto además de un día de viento de terral que vino. Esto no es nada comparado con España y Europa.
En lo que llevamos de verano, es uno de los más calurosos, desde que hay registros. Lo peor del caso son las hectáreas quemadas, porque el calor se sofoca en las playas y piscinas, pero lo quemado no tiene remedio.
Hay personas que aguantan mejor el calor que otras. Yo soy una de ellas, le temo más al frío intenso y a la lluvia que al calor. También es verdad que con el frío se abriga uno y listo, pero yo no lo soporto.
Hablando de otra cosa, hoy es la final de la Eurocopa entre España y Alemania sub-21. Ojalá que gane España, que igualaría a Italia en 5 copas ganadas. Esperemos que el calor no lo estropee y tengamos un interesante partido de futbol.
A pesar del calor y de no tener aire acondicionado en casa, me quedaré a ver todo el partido. Que jueguen bien y que gane el mejor.
Volviendo al calor, se da uno una ducha fría y se quita todo y el que tiene aire acondicionado no lo siente. Vamos a tener según la meteorología un verano caluroso y seco. Veremos que pasa porque la estación no ha hecho nada más que comenzar y el tiempo es imprevisible, incluso para los expertos en la materia.
Este verano tenemos menos ocupación hotelera, en España, de momento: Los turistas buscan sitios más baratos para pasar las vacaciones y eso es malo para nuestro país, porque hay menos ganancia.
Esperemos que la cosa mejore y tengamos un verano provechoso.
ÚLTIMA HORA: España a ganado a Alemania 2-1, con lo que es campeona.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA.