NO TENEMOS ARREGLO
10-02-2023
Cada un@ actuamos como mejor nos parece, no tenemos en cuenta
de que los demás están ahí, que como nosotros tienen su corazoncito, pero no
nos importa, seguimos adelante con nuestras cosas, pensamos que llevamos la
razón en todo y nos importa un pito los demás, esto es la ciudad sin ley y a
quien no le guste nuestro proceder que se de un chocazo contra una esquina, que
nosotros vamos a seguir con nuestra cabezonada.
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No estamos contentos con nada, todo nos parece poco para
nosotros, no nos importan el qué dirán, nuestro parecer es el que impera, los
demás son cuenta aparte, solo sabemos decir lo que nos conviene, que le vamos a
hacer si hemos nacido libres, pues nos lo tomamos al dedillo, hacemos lo que
nos da la gana y allá el contrario. Si hacemos algo bien es por obligación, no
porque nos salga de dentro.
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En esta sociedad consumista solo vemos los defectos del
contrario, no miramos un poco hacia nuestros adentros y si lo estamos haciendo
bien o no, no tenemos miramiento. Somos muy corteses porque no queremos que
nadie nos reproche lo que estamos haciendo, damos las gracias por todo, pedimos
perdón si nos rozamos con otra persona en el bus, por ejemplo, pero es porque
no nos llamen la atención. En una palabra, pretendemos ser perfectos y don
perfecto no existe.
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Somos muy formales en nuestro puesto de trabajo, porque este
nos obliga y cuando terminamos, nos olvidamos los buenos modales, las
salutaciones, el respeto, nos olvidamos que los que nos encontramos por la
calle también son personas dignas de ser saludadas, merecedoras de nuestro cariño y todo esto no debería ser
así, deberíamos ser los mism@s por la
calle que es donde se demuestra como es cada un@.
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Lo que yo pretendo decir es que debemos convertir al mundo en
nuestra casa, que si en nuestra casa o en nuestro trabajo somos muy educados,
pues igualmente fuera de estos sitios debemos seguir siéndolo. Por esta razón,
yo considero al mundo mi casa y en mi casa me tengo que comportar debidamente.
Si no lo hago así, me reprenden y yo no quiero que nadie me tenga que regañar
por mi actitud. Igual o parecido os pasará a vosotr@s.
JOSÉ ANTONIO MÉRIDA JUÁREZ.
